Los jóvenes barquisimetanos Romer Peña, narrador oral, y Miguel Colmenárez, músico, se alzaron con el Premio a la excelencia académica en el Congreso Latinoamericano de estudiantes de Psicología, celebrado en Bogotá, del 15 al 17 de mayo.
Los estudiantes del 8º semestre de Psicología en la Universidad Yacambú (UNY) obtuvieron el reconocimiento por su investigación Influencias de la educación musical sobre los niveles de resiliencia.
Este proyecto fue concebido para la cátedra Psicología experimental, de la UNY. Sin embargo, los autores decidieron ampliar el contenido para enviarlo al evento internacional.
Durante un mes y medio estudiaron a 60 niños con edades comprendidas entre los 9 y 12 años, que habitan en la parroquia Tamaca y cursan entre 3º y 6º grado de primaria.
En la muestra involucraron a niños instruidos en el núcleo Centro Norte, del Sistema Nacional de Orquestas y Coros de Venezuela y otros que no integran el programa.
Los resultados del trabajo apuntan a que los inscritos en el Sistema responden mejor frente a las adversidades.
Lo opuesto ocurre entre los pequeños que no asisten a alguna actividad cultural, explicó Peña en visita a nuestro rotativo.
“Se evidenció que el arte incide en el rendimiento académico y la conducta”.
Indicó que el fenómeno musical producido en nuestro país llama la atención fuera de las fronteras. De allí que se abocaran a las posibilidades que brinda el reconocido Sistema, fundado por el maestro José Antonio Abreu.
“Acercarnos a este movimiento tan grande que tenemos, conocer las cualidades que nos brinda la música ha sido satisfactorio”.
Comentó que acudieron a comunidades rudas, donde los pequeños están en situación de riesgo, pero que tienen la esperanza sobre el naciente núcleo Centro Norte.
“Visualizamos el poder que tiene la música sobre el lenguaje, la comprensión lectora, la creatividad, la sensibilidad y las emociones”, sostuvo.
Reveló estar sorprendido al apreciar cómo esos niños conocen a temprana edad de Beethoven y Tchaikovski para contagiar a su núcleo familiar de buenos hábitos, capaces de sembrar valores.
“Encontramos testimonios de mejoras en los hogares luego de que los padres llevaran a sus hijos al Sistema”.
Reiteró que este programa social llena de esperanza a las futuras generaciones. La investigación se ampliará más adelante, luego de que los autores percibieran “los milagros del Sistema”.
