Arístides Bastidas

Hace apenas semanas, el 12 de marzo, se cumplieron 90 años del nacimiento de Arístides Bastidas, un periodista de huella profunda quien con su obra y trayectoria ejemplar ha debido ser  al menos recordado por las autoridades del CNP.
Lo rememoro cuando cursaba mis primeros años de Comunicación Social en la UCV y nos regaló una clase magistral. Se movilizaba ya en una silla de ruedas pero con sus palabras nos elevó hacia un periodismo comprometido con la ética, con la ciencia y por sobre todo con el país.
Nació en San Pablo, estado Yaracuy. Reportero, periodista e investigador científico. Autodidacta que sin haber cursado enseñanza superior, era profesor  honorario de varias universidades y sobre su figura se han hecho tesis  doctorales y otros estudios y se han publicado biografías. Escritor de El Átomo y sus Intimidades, Científicos del Mundo, Aliados Silenciosos del Progreso, El Anhelo constante, Los Órganos del Cuerpo Humano y  La Ciencia Amena. Fundó en 1969 la Asociación Iberoamericana de Periodismo Científico. Ganó dos veces el Premio Nacional de Periodismo, El Premio Latinoamericano de Periodismo Científico John Reitermeyer, varias veces el Premio Municipal. Ganador del prestigioso certamen Kalinga, otorgado por la Unesco, considerado el Premio Nobel de la divulgación científica, recibido entre otros por Julián Huxley, Bertrand Russell y Augusto Pi Suñer. Horas antes de su muerte  un 23 septiembre de1992, llegó a saber que había sido premiado por la Universidad  de Florencia con el Capire, Premio Internacional para un Futuro Creativo.
Uno de sus grandes virtudes personales fue su inmensa humildad, con esta humildad que le era propia  sugiero a las seccionales de Lara y Yaracuy que para la próxima celebración del Día del Periodista se le haga un homenaje y lo podamos recordar como un emblema de dignidad, honestidad y vocación de servicio. Arístides Bastidas es parte de esa historia grande y hermosa del periodismo venezolano.