Aunque resulte increíble, numerosas familias de un sector de la urbanización Los Castaños, en la Piedad Norte, tienen unos diez meses sin recibir agua por tuberías.
El servicio lo tuvieron hasta que las cuadrillas de Hidrolara comenzaron a dotar del mismo a nuevas construcciones en la parte alta y no tomaron en cuenta si afectaban o no a quienes residen en la parte baja de la urbanización.
Este martes varias de las familias afectadas, entre las que estaban la Sáez, Chacín, Padrino, Daboín, Torres, Gómez, Forero, Páez, Salgado y Castillo, se reunieron en la vía pública para reiterar su llamado a Hidrolara a fin de que les solucione la situación que están confrontando.
Onésimo Sáez explicó que luego de que Hidrolara dotó del servicio a nuevas unidades residenciales comenzaron para ellos los problemas, aparentemente porque los encargados de las instalaciones no tuvieron cuidado y dejaron tapadas las tuberías.
“El colmo es que por las tuberías no sale nada de agua, pero mensualmente sí nos llegan los recibos hasta por 400 bolívares”, dijo Sáez.
Elizabeth Torres, por su parte, señaló que están obligados a comprar cisternas cada quince días para llenar los tanques de sus casas y cada uno de ellos les cuesta dos mil bolívares.
-¿Y no han reclamado en Hidrolara?
-Estamos cansados de ir y nunca hacen nada. A veces nos dicen que no tienen presupuesto y una vez vino un técnico que miró y se fue dejándonos en las mismas condiciones, respondió Sáez.
En una oportunidad, cansados de tanta negligencia por parte de la hidrológica tomaron la avenida y les prometieron resolverles la situación, pero siguen esperando.
Son más de diez meses que llevan las 200 familias, o más, de las calles 1 y 2 de Los Castaños, La Piedad Norte, sin recibir una gota de agua por tuberías.
En cualquier momento volverán a protestar cerrando la avenida, dispuestos a no reabrirla hasta tanto la hidrológica las resuelva el problema y no retirarse con promesas pues han perdido la credibilidad en los ingenieros de la empresa.
El grupo insistió en que están cansados de tanta indolencia y aunque no son guarimberos, volverán a protestar por algo tan indispensable como el agua.
