#Especial: Despedidos del Seniat exigen derecho al reenganche

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Trabajadores valientes, resteados, que se juegan todo por el todo, aunque su lucha es contra molinos de viento y considerada por muchos como imposible de ganar.

Siete trabajadores de la oficina técnica del Seniat en Lara, recibieron una notificación de despido luego de haber firmado para activar el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, una decisión personal, pero que se hizo pública cuando sus nombres aparecieron en la data digital del Consejo Nacional Electoral (CNE).

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Se trata de profesionales de carrera aduanera, con más de quince años de servicio, caracterizados por su mística y con historiales intachables; ninguno de ellos tiene siquiera una amonestación verbal que los pusiera en sobre aviso.

La hoja, idéntica en todos los casos,  en donde les notifican que fueron removidos de sus cargos y que concluye toda relación laboral con el Seniat, los abofeteó.

A todos con la misma justificación: ocupaban cargos de libre nombramiento y  remoción, es decir “de confianza” por lo que el superintendente tenía la atribución de retirarlos y así lo decidió.

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Sin embargo, según explican los afectados, ninguno de ellos era “de confianza” sino que ocupaban cargos de carrera, ingresaron a la institución por concurso,  superaron el período de prueba y gozaban de estabilidad.

Violan fuero maternal

Eleonora Dappo, adscrita a la División de Sumario Administrativo, con 21 años de servicio, fue la primera en ser notificada.

El viernes 17 de junio, en horas de la tarde, Rafael Eduardo Rodríguez, gerente regional, le preguntó si había tenido algún problema en el Seniat porque recibió un correo desde Caracas en donde le asignaban la tarea de notificarla como removida y no especificaba causal.

Ella se negó a recibir el documento, el lunes 20, el gerente le reitera que tenía  orden de notificarla y ella le recuerda sobre su fuero maternal, estaba en período de lactancia y por lo tanto gozaba de inamovilidad laboral. La respuesta de su jefe fue sencilla: son órdenes.

A las 9:25 de la mañana del martes 21, Eleonora decide firmar la notificación, y cuando sube al piso 6 de la Torre David, en el área del sindicato, se percata que no es la única.

“Se oían rumores en los pasillos”

Su compañera de trabajo Sara Puentez, con 18 años y seis meses de servicio, y ocupando el cargo de especialista aduanero y tributario grado 15, también fue despedida.

-Se oían rumores en los pasillos que era “peligroso” ir a firmar, pero ningún jefe nos había advertido directamente. Hasta ese momento, en el Seniat no había presión política y cada quien opinaba como quisiera, lo máximo que tuvimos que hacer por el Gobierno fue ponernos la franela roja del uniforme.

Contrario a lo que desde afuera se percibe, los afectados aseguran que la gran mayoría de los trabajadores del Seniat no militan en el Psuv. Dicen que cuando José Vielma Mora ocupaba el cargo de superintendente, no incorporó el tema político en el trabajo, en cambio, a la llegada de José David Cabello, el organismo “se vistió de rojo”.

Pese a ese cambio, los trabajadores no tuvieron dudas de participar cuando se convocó la primera recolecta de firmas para el referendo, y sorprendentemente después de ser despedidos por esa razón, se dirigieron a la sede del CNE regional para validar su firma.

-Yo soy católica y a mis hijos los enseño con el ejemplo, no me arrepiento de nada y continúo firme en mis principios, dice Sara Puentez.

El golpe no ha sido fácil de afrontar, los afectados y sus familias de un momento a otro se quedaron sin ingresos, pero también sin seguro HCM, servicio funerario, aporte de guardería, útiles escolares y sin una rutina laboral.

Ahora gran parte de las horas del día  trabajan en función de lograr el reenganche, agotan todas las vías legales, la causa es justa.

“No tengo problemas disciplinarios, ni de salud ni de cumplimiento de meta. Yo estudié derecho y el derecho busca la justicia, no puedo perder las esperanzas” dice Eleonora Dappo.

Su compañero José Luis Ramos, profesional aduanero y tributario grado 14 y  secretario general del sindicato, explica que actualmente todos los trabajadores del Seniat gozan de inamovilidad porque a nivel nacional existe un proceso de elecciones sindicales.

-Como todos los trabajadores pueden ser candidatos sindicales, la Ley Orgánica de Trabajo (LOTTT) contempla que no pueden ser despedidos ni desmejorados, otra ley pisoteada por ellos.

Cuando Ramos se enteró de lo que le había pasado a sus compañeros, se imaginó que el próximo era él y estaba en lo cierto. Aunque no había ejercido proselitismo político en la empresa, estampó su firma muy clara para solicitar el revocatorio presidencial.

Dice sentirse afectado porque fueron 27 años de servicio en el Seniat, pero:

-Me siento liberado de esta opresión, cuando esta semana vino Diosdado Cabello, vi con tristeza que mis compañeros tuvieron que ir a la marcha para cumplir, después de lo que nos pasó a nosotros, tienen mucho miedo.

Un resurgir

Todos quieren un organismo netamente profesional, donde se respeten los logros académicos y laborales, donde llegue un gerente que le “devuelva” el privilegio que significaba trabajar en la empresa. Para ellos no es concebible que profesionales tan capacitados que en su momento devengaban ocho sueldos mínimos, ahora forzosamente alcancen el salario base.

Están convencidos de que el potencial todavía lo tienen y desean que más temprano que tarde se logre el “resurgir” del Seniat.

Agotan todas las instancias legales

Los trabajadores están respaldados por el Movimiento Vinotinto, asociación civil enfocada en las luchas por los Derechos Humanos, sociales y civiles, a cargo del abogado Manuel Virguez. La Defensoría del Pueblo tiene conocimiento de los casos e igualmente la Inspectoría del Trabajo.  Más de dos meses han transcurrido desde la petición de pronunciamiento y actuación por parte de ambos organismos y aún no hay una respuesta para los afectados.

A nivel nacional, el superintendente del Seniat removió a unos 200 trabajadores tras la difusión de la lista de los solicitantes al referendo revocatorio. “Pueden llamarme como quieran, pero si hay escuálidos infiltrados y quedan al descubierto, van a tener que irse, asuman su responsabilidad” fueron declaraciones del diputado Diosdado Cabello. Mientras que el defensor del Pueblo, Tarek William Saab dice que cualquier trabajador de la administración pública debe ser evaluado solo en base a su desempeño laboral y que hasta ahora no ha recibido denuncias sobre despidos injustificados.

Marisol Silva

Ingreso: 1/7/1992

Despido: 22/8/2016

José Gregorio Calderón

Ingreso: 1/12/1997

Despido: 8/7/2016

*Estaba de reposo médico y le enviaron la notificación de despido a su casa

Isamel del Valle Pomar

Ingreso: 16/5/1996

Despido: 10/8/2016

Ana LaRoca

Ingreso: 1/7/1992

Despido: 12/8/16

José Luis Ramos

Ingreso: 1/7/1992

Despido: 7/7/2016

Sara Puentez

Ingreso: 01/12/1997

Despido: 20/6/2016

Eleonora Dappo

Ingreso: 17/05/1995

Despido: 17/6/2016

Mildred Viscaya

Ingreso: 27/08/1999

Despido: 4/8/16

*Desde 1987 laboró como suplente

Un caso particular

La señora Mildred Viscaya era aseadora de la oficina técnica del Seniat en Lara, el jueves 4 de agosto a la 1:30 de la tarde, día en el que realizaba sus labores como cualquier otro, le notificaron que estaba despedida:

“Quien suscribe, José David Cabello Rondón, titular de la cédula de identidad No. V-10.300.226, en mi condición de máxima autoridad del Servicio Nacional Integrado De Administración Aduanera y Tributaria, según lo dispone el artículo 7 de la Ley del Seniat, y de conformidad con establecido en el artículo  77 de la Ley Orgánica del Trabajo de los Trabajadores y Trabajadoras, cumplo con hacer de su conocimiento la decisión de despedirla del cargo de aseador”.

Cuenta Mildred que tras leer esas líneas, su cara se adormeció, compañeros de trabajo la llevaron de inmediato a un centro médico y le diagnosticaron un proceso de Accidente Cerebrovascular (ACV).

La trabajadora tenía 29 años en el organismo y actualmente se encuentra en la casa de un familiar fuera de la ciudad, mientras se recupera física y emocionalmente para continuar en la lucha por su reenganche.

La señora de 54 años es viuda, sostén de hogar y tuvo varias complicaciones de salud tras el fallecimiento de su hijo.

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