Leoner Antonio Amador Suárez, de 21 años, se sentó junto con su esposa en un puesto de comida rápida ubicado en la calle Roseliano Sequera de Tintorero, este domingo por la noche, para cenar. A la pareja y al resto de los comensales los sorprendieron dos hombres armados que llegaron al sitio para cometer un atraco. Pero en el momento de tensión un leve movimiento provocó que los asaltantes dispararan contra Amador.
La orden de los delincuentes era que todos los presentes fijaran la mirada en el suelo, pero Amador, posiblemente, en una reacción involuntaria se levantó con las manos en alto como para anunciar que estaba desprovisto de objetos valiosos. Esto, al parecer, alteró sobremanera a los hampones y le dispararon dos veces. Le apuntaron en la cabeza y el brazo.
Para la familia ya son dos las personas que les arrebata la delincuencia.
Emprendedor fue el primer adjetivo que vino a la mente de uno de los tíos de la víctima para describirlo. Se refería a los no pocos planes que tenía trazados el muchacho, quien aunque se dedicaba mayormente al comercio de mercancía de forma independiente, hace poco había decidido probar con la agricultura, animado por otros parientes expertos en esa área.
Paralelo al trabajo, el mayor de tres hermanos comenzó a estudiar Educación, mención Matemática en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (Upel). Cursaba el segundo semestre.
En seis meses se convertiría en padre.
