El doctor César Pérez Vivas, precandidato a la elección Primaria del próximo 22 de octubre por el movimiento político y social Concertación Ciudadana, afirmó que este ha sido un régimen corrupto desde su comienzo, pero consolidó la corrupción con la denominada Ley constitucional antibloqueo para el desarrollo nacional y la garantía de los derechos humanos.
Al declarar sobre esta ley publicada el 12 de octubre del 2.020 en la Gaceta Oficial extraordinaria número 6.583, expuso que «dicha ley fue propiciada por Nicolás Maduro y su más cercano entorno, en el cual no podía faltar Tareck El Aissami, ministro de Petróleo, de quien se dice que propuso y se llevó a cabo la moneda “petro” para burlar las sanciones estadounidenses y poder vender el crudo y, posteriormente, recurrir a los criptoactivos».
«Este régimen se instaló hace veinticuatro años con el mayor engaño que se le ha hecho a la población venezolana», continuó diciendo Pérez Vivas.
Anunció que esta combatiría la corrupción y acabaría con la pobreza, pero lo que ocurrió después es conocido por todos, aseveró.
«Se ha producido el más descomunal robo que haya conocido el mundo en este siglo, estimado en 500 mil millones de dólares, y al mismo tiempo la pobreza se ha extendido por todo el territorio, obligando a más de siete millones de venezolanos a buscar mejorar sus condiciones de vida en el exterior, corriendo los mayores peligros en pasos como el de Darien y las trochas de la frontera», puntualizó.
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Acotó que «ha sido de tal magnitud la explosión putrefacta de la cúpula roja que ha sacado a flote a una gran cantidad de funcionarios de Pdvsa y a empresarios beneficiarios, quienes presuntamente serán enjuiciados».
El dirigente político, exgobernador del Táchira, exparlamentario y profesor universitario, puntualizó que mientras esto ocurre, «en todo el país los educadores siguen protestando y exigiendo no sólo que les paguen sus salarios que les han sido mermados, sino que les restauren los beneficios que les arrebató la Oficina Nacional de Presupuesto, violando la Constitución y las leyes».
«Y así como los profesionales de la educación, también están exigiendo lo suyo los demás trabajadores de la administración pública, así como los jubilados y pensionados que están muriendo de hambre y de los males que afectan su salud», sentenció.
Por último, Pérez Vivas terminó sus declaraciones recordando las palabras de Cicerón: «servirse de un cargo público para el enriquecimiento personal resulta no sólo inmoral, sino también abominable y criminal».
