La Congregación de las Hermanas Teresianas informó el lamentable fallecimiento de la hermana Inah Canabarro Lucas, en Porto Alegre, al sur de Brasil. La religiosa brasileña, quien había alcanzado la venerable edad de 116 años, era reconocida a nivel mundial como la persona más longeva del planeta.
De acuerdo una nota publicada por El Nacional, la hermana Inah asumió el título de decana de la humanidad en enero de 2025 tras la muerte de la japonesa Tomiko Itooka, quien también tenía 116 años. Con su partida, el reconocimiento de la persona más anciana del mundo pasa ahora a Ethel Caterham, una ciudadana británica que cuenta con 115 años y 252 días, según los datos verificados por el Grupo de Investigación Gerontológica (GRG) de Estados Unidos y la organización LongeviQuest.
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En la nota difundida, a pesar de algunas inconsistencias en registros sobre su fecha de nacimiento, señalan que el GRG confirmó que la hermana Inah Canabarro Lucas nació el 8 de junio de 1908. A lo largo de su extensa vida, la religiosa fue un ejemplo de fe y dedicación a su comunidad.
Destacan que cuando en alguna ocasión se le preguntó sobre el secreto de su longevidad, la hermana Inah ofreció una respuesta sencilla y profunda: «Él es el secreto de la vida. Es el secreto de todo», refiriéndose a su profunda fe en Dios.
En el año 2018, poco antes de celebrar su 110 cumpleaños, la hermana Inah Canabarro Lucas recibió la bendición apostólica del Papa Francisco, quien falleció recientemente el 21 de abril a los 88 años. La partida de la hermana Inah marca el fin de una vida longeva y dedicada al servicio religioso, dejando un legado de fe y perseverancia.
