La feligresía de Barquisimeto fue testigo de una imagen significativa este domingo 8 de junio, cuando la parroquia Santa Rosa, a través de su cuenta oficial de Instagram, reveló la sagrada figura de la Divina Pastora ataviada con un vestido rojo.
Esta elección de color simboliza la Solemnidad de Pentecostés, una de las festividades más importantes del calendario litúrgico católico.
Pentecostés, que se celebra 50 días después del Domingo de Resurrección, marca el fin del Tiempo Pascual y conmemora un evento trascendental: la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles y la Virgen María. Es en este día cuando la Iglesia renueva su fe en la fuerza transformadora del Espíritu.


La figura de la Virgen María cobra especial relevancia en esta celebración. María encarna la respuesta de amor y perfecta adaptación a la voluntad divina, tal como lo hizo al recibir el anuncio del ángel.
“El Espíritu de amor y de paz, para que abra las fronteras, abata los muros, disuelva el odio y nos ayude a vivir como hijos del único Padre que está en el cielo», indicó el Papa León XIV, haciendo un llamado a la unidad y la fraternidad en estos tiempos.
María, madre de la iglesia
Es importante recordar que el 9 de junio, al día siguiente de Pentecostés, la Iglesia celebra la memoria de la Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia.
Esta conmemoración es una oportunidad para profundizar en el papel fundamental de María en la naciente Iglesia, bendecida y fortalecida por el don del Espíritu Santo.