Una jornada de entretenimiento se tornó en tragedia este jueves en el parque de diversiones Green Mountain, en la ciudad turística de Taif, al oeste de Arabia Saudita, luego del colapso de una atracción mecánica que dejó 23 personas heridas, tres de ellas en estado grave.
El accidente ocurrió en la popular atracción “360 grados”, una estructura giratoria de alta velocidad que, según testigos, se partió en dos mientras se encontraba en funcionamiento. Visitantes del parque grabaron el momento exacto del colapso, cuyas imágenes se viralizaron rápidamente en redes sociales, generando indignación y preocupación por la seguridad en estos espacios de esparcimiento.
Un crujido, el preludio del colapso
De acuerdo con relatos recogidos por medios locales como Okaz, el juego alcanzaba su punto más alto cuando un fuerte crujido alertó a los presentes. Segundos después, la estructura se sacudió violentamente, impactó contra un pilar y una de sus partes se desprendió, lanzando componentes metálicos a gran velocidad. El eje central de la atracción retrocedió con fuerza y golpeó una zona donde se encontraban varios visitantes.
A pesar de la magnitud del accidente, los sistemas de seguridad funcionaron en su mayoría, lo que evitó que los pasajeros fueran expulsados. Sin embargo, varios de ellos sufrieron lesiones al intentar liberarse de los restos. Equipos de emergencia acudieron rápidamente al lugar, aplicaron primeros auxilios y trasladaron a los heridos a hospitales cercanos bajo el protocolo de emergencia Código Amarillo.
Investigación oficial y cierre temporal
El Ministerio del Interior saudí anunció el inicio de una investigación oficial para determinar las causas del accidente. Las primeras hipótesis apuntan a una falla mecánica o daño estructural no detectado durante inspecciones previas. Como medida inmediata, el parque fue cerrado temporalmente y se ordenó una revisión integral de todas las atracciones mecánicas del país.
El incidente ha provocado una ola de críticas en redes sociales, donde usuarios exigen mayores controles de seguridad, auditorías rigurosas y sanciones a los responsables. La presión ciudadana ha llevado a las autoridades a prometer medidas más estrictas en la regulación de parques de diversiones.
Precedente preocupante
Este siniestro revive la preocupación por la seguridad en este tipo de instalaciones, especialmente tras el accidente ocurrido a comienzos de año en India, donde una joven de 24 años murió al caer de una montaña rusa debido a una falla en el cinturón de seguridad.
Por ahora, el foco está puesto en la recuperación de los heridos y en esclarecer las responsabilidades detrás de este nuevo episodio que, aunque no cobró vidas, evidencia graves fallos en la supervisión y mantenimiento de instalaciones recreativas en uno de los sectores turísticos en crecimiento de Arabia Saudita.
