En nuestro país conspiran contra las expresiones autóctonas de la cultura la transculturización impuesta desde el exterior y las concepciones torcidas del progreso y lo nuevo.
No obstante, desde los tiempos de la colonia la edificación que hoy ocupa al Museo de Barquisimeto cumple funciones de hospital alternando con la de cuartel.
En 1964 es mudado el Cuartel Jacinto Lara siendo traspasada la construcción a FUNDALARA, cuyos directivos tienen la descabellada idea de demolerla.
La amenazante situación persiste hasta el año 1974 cuando asume la presidencia del Concejo Municipal de Iribarren el abogado Gustavo Adolfo Anzola Lozada, sensible a los asuntos del arte y la cultura.
Entonces la polémica abogada propone a la cámara municipal la compra del edificio salvándolo de su destrucción.
Luego es la entonces gobernadora del estado Lara Dory Parra de Orellana quien firma el decreto que crea el Museo de Barquisimeto.
Pero es ocho años después, cuando en julio de 1982, se hace realidad la fundación de la nueva institución museística de la entidad, bien llamada “La Casa grande de los barquisimetanos”.
Asì la actual sede del Museo de Barquisimeto escapò de la piqueta demoledora gracias a la oportuna intervenciòn de este eximio barquisimetano
Fue quien le salió al paso a este agresión contra la cultura espiritual y material de la urbe para conservarlo como parte del patrimonio y la identidad cultural conocida como la barquisimetaneidad.
Cuando se alude a la institución museística con motivo de sus 42 años de existencia, es necesario referirse a este visionario abogado, político y líder del Barquisimeto tradicional en transición hacia la modernización luego de la década de 1950.
Se trata de una personalidad consustancial con el progreso de Barquisimeto en lo cultural, educativo, económico, comercial e industrial. Lo demuestra fehacientemente durante su gestión como presidente del Concejo Municipal de Iribarren.
Sensible a las manifestaciones del arte se realiza como escritor publicando varios libros con referencia permanente a la ciudad, hace periodismo de opinión en el diario El Impulso y hombre de radio con el programa El Abogado y la comunidad por Radio Barquisimeto en la décadas de 1970 y 1980. Luego por Lara 870 con su espacio matutino a partir de la primera mitad de la década de 1990, cuando lo conocimos y cultivamos amistad.
Poco cuenta que políticamente haya sido catalogado como un hombre de derecha. Lo que importa es su postura avancista y sus aportes al desarrollo de la ciudad-
Transcurridos 42 años el Museo de Barquisimeto alberga en sus siete salones 1140 piezas de la variedad de arte, gracias al mecenazgo de este ilustre barquisimetano.