La amenaza militar de Estados Unidos y el conflicto político puertas adentro, no son justificativos para dejar de lado los problemas de los venezolanos producto de la profunda crisis económica y social de Venezuela, afirmó en RP la vicepresidenta del MAS, María Verdeal.
«Siempre hay excusas para correr la arruga y no discutir el déficit en la prestación de los servicios públicos, el tema salarial o el viacrucis de padres y representantes para adquirir los útiles, textos y uniformes escolares. La familia se sacrifica para enviar a sus niños y adolescentes al sistema educativo».
Verdeal recordó que está paralizada la contratación colectiva de los docentes y de todos los trabajadores que dependen de la administración pública.
Abogó por el desarrollo de una agenda pública para dar respuesta urgente a las dificultades de la población que a diario se agudizan. Enfatizó que al igual que el salario, las pensiones y jubilaciones son inexistentes, sumado a la inestabilidad cambiaria que golpea el poder adquisitivo y la calidad de vida de los venezolanos.
«Quienes están en el poder no se ocupan de estos problemas económicos y sociales, sino de ‘sus prioridades políticas’…».
Sobre la escalada de persecución y violencia política, la dirigente de la tolda naranja advirtió que durante el fin de semana se produjeron más detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas.
Puntualizó el caso de Macario González, exalcalde de Barquisimeto y exdirigente del MAS, de quien se desconoce su paradero luego de dictar su clase el pasado viernes en una universidad del estado Lara.
«La puerta giratoria se amplía para que ingresen nuevos presos políticos y no para lograr la paz a través de una amnistía general. Al país no se le puede pacificar con un látigo ni con el abuso del poder. Basta de persecuciones y del discurso agresivo por parte de altos personeros gubernamentales».
Respecto a la amenaza militar, Verdeal mencionó que los gobiernos de Venezuela, Colombia y Estados Unidos se han pronunciado públicamente sobre su lucha contra el narcotráfico.
«¿Por qué no ponerse de acuerdo entonces por la vía diplomática y unir esfuerzos para combatir este flagelo y no que se vea como un conflicto bélico contra nuestro país?»
Subrayó que ningún país de América Latina tiene cómo responder militarmente a un enfrentamiento con los Estados Unidos, por lo que el MAS rechaza cualquier intervención extranjera y pide bajarle el volumen a estas provocación bélicas.
Aseguró que el partido naranja está en contacto permanente con los sectores democráticos pero no con el gobierno porque se mantiene cerrado y ha paralizado todas las vías de comunicación, exigiendo solamente unidad para defender la soberanía nacional.
“El territorio venezolano no puede ponerse en juego, retando a una potencia militar como Estados Unidos».
Recalcó que al gobierno le corresponde dar gestos de entendimiento y no hacer lo contrario como perseguir, detener y limitar la pluralidad del pensamiento político. Verdeal sostuvo que el llamado al alistamiento de la población es algo simbólico.
«Que se pretenda enfrentar a una potencia mundial con personas sin ninguna formación o preparación, sería utilizarlas simplemente como carne de cañón”, concluyó.