Prosas a la Reina Maria Lionza

Cual susurro de Dios, es tu voz divina,
Limpia y pura, como el agua cristalina;
Y los que de ti piensan mal, cual
equivocados están, si eres como la miel,
dulce y transparente en su panal, y la
gran luz que dios te dio, y que brilla en
Sorte y en toda Venezuela, la compartes
con tanto necesitado, igual a una humilde
maestra de escuela; todo aquel que de
buena fe, a ti acerca, nunca sin nada se ira,
aunque sean tus bellas bendiciones, que de
tu corazón saldrán, y un consejo que a tiempo,
mucho en su vida ayudara, mostrándole el
camino de dios, donde deberá trajinar, y si
no te apartas de el, al señor se llegara:
madrecita, madrecita; a ti canto con amor,
estas humildes prosas, pero hechas con gran
fervor; Reina María Lionza bella, para mí
siempre serás la más pura y bella estrella.