A las 8 de la noche del miércoles al sector Toñito Uranga, de Pavia, llegaron dos sujetos tocando la puerta de una de las viviendas.
“Buenas”, fueron las palabras que dijeron los hombres a Yarecsi, nombre que tiene la joven que abrió la puerta de la residencia a la cual habían llegado. Ella vio que los sujetos portaban armas y, tras empujarla, le indicaron que se trataba de un atraco.
La mujer, desesperada, corrió hasta el cuarto, en donde se encontraba acostado su esposo Víctor Alfonzo Carucy Pineda (24), junto a su hijo varón de año y medio. “Gordo, vienen a robar”, gritó la mujer, mientras le arrancaba al bebé del pecho y agarraba a su otra hija de 4 años. Yarecsi salió de la casa, corrió hasta una quebrada cercana, para refugiarse de los individuos.
Carucy Pineda, fue a levantarse de la cama para ver qué pasaba y en eso los dos delincuentes entraron y le dispararon. Un tiro en el abdomen y otro en el pecho que le salió en la espalda lo derribaron en la cama. Seguido de ello los delincuentes se fueron.
Los familiares de Carucy Pineda se acercaron hasta la casa y al verlo mal herido, detuvieron un rapidito, lo montaron y trasladaron hasta el seguro social Pastor Oropeza en donde ingresó sin signos vitales.
Testigos del hecho contaron que mientras los familiares estaban para el centro asistencial, los hampones regresaron al lugar de los hechos y se robaron un equipo de sonido, una planta y el teléfono celular de la víctima.
Era taxista
Mariana Carucy relató que la víctima era el segundo de cuatro hermanos y el único varón. Desde hace dos años se ganaba la vida como taxista, trabajaba como avance en la línea Algarí de Pavia.
“Mi hermano era una persona tranquila, primera vez que en la familia atravesamos por una situación así, por ello le dejamos todo en manos de Dios”, exclamó Carucy.
La hermana afectada también recordó que a las 6 de la tarde, el taxista llegó de su trabajo, pasó a visitar a su madre quien hacía 15 días fue sometida a una intervención quirúrgica. Antes de irse, abrazó a la señora y le dijo que la quería mucho. Así mismo el taxista visitó a tres vecinos, a quienes les indicó que se prepararan que el sábado cumpliría sus 25 años y además le pondría el agua a su hijo, por ello la celebración debía ser por todo lo alto.
La víctima compró una película a las 7 de la noche y se fue para su casa; seguido de eso los dos delincuentes acabaron con su vida.
Foto: Archivo
