La profesora Gladis Guédez, directora de la Unidad Educativa Domingo Hurtado, ubicada en Carorita Abajo, parroquia El Cují, en el norte de la ciudad, explica con preocupación la situación de la cancha deportiva de la institución que cuenta con más de 25 años de fundada. No está techado el espacio donde los pequeños escolares se ejercitan bajo el sol.
“Los niños tienen que hacer sus actividades físicas, soportando el sol, deshidratándose con el calor; ojalá las autoridades tomen conciencia y manden los recursos para el bienestar de los alumnos”, expresó la docente. Los pocos avances dentro de la casa de estudios, se debe en gran parte a la buena voluntad de los padres y representantes.
Un grupo de personas de la comunidad, con hijos inscritos en la escuela del sector, recaudaron dinero para techar el teatro infantil, debido a los constantes inconvenientes manifestados por los grupos de danzas de las diferentes secciones. La profesora Guédez, agradeció la disposición de los papás en socorrer al plantel y hacerle frente a una de las necesidades.
Sin embargo, todavía quedan cosas por mejorar y sólo con la asistencia del gobierno regional será posible superar los inconvenientes en la planta física. La escuelita estadal tiene también problemas con los grifos de agua: todos están dañados. Los niños tienen que llevar el vital líquido en recipientes para calmar la sed durante la jornada académica.
Tampoco los sanitarios se encuentran en su mejor momento y haría falta sustituir las baterías de baños. La cerca perimetral, igualmente requiere de la pronta atención porque corren riesgos los equipos o inmobiliario de la institución con la delincuencia de la zona.
En este sentido, Alexis Pérez, dirigente vecinal de la parroquia El Cují, manifestó que las casas de estudios de la zona funcionan en algunas áreas únicamente por la contribución económica de los padres y representantes.
Enalteció que exista compromiso por parte de la comunidad, no obstante, cree necesario que el Ministerio (pp) de Educación con mayores posibilidades económicas debido a que pertenece directamente al Gobierno nacional, muestre una cercanía sincera con las escuelas y liceos de las zonas populares.
“Se limitan haciendo diferencia entre si es una escuela nacional o estadal; los problemas de los niños deben resolverse y ya: basta tenderles la mano cuando más lo necesitan. Se requieren de nuevas aulas, remodelación de espacios, implementos didácticos, entre otros beneficios”, declaró.
Por lo pronto, en la Unidad Educativa Domingo Hurtado continúan organizando iniciativas de fondos, a cargo de los representantes, a objeto de ir solventando poco a poco las principales necesidades. “No vamos a esperar a que las autoridades se dignen de ayudar a la escuela, los representantes sacamos adelante las instalaciones, en la medida de nuestras posibilidades, por amor a los niños”, dijo una de las madres.
