Circo y habilitante

El verbo le queda demasiado grande o pequeño (según el cristal o prisma en que se miren las cosas), si tomamos en cuenta el concepto Habilitante: Hacer a una persona o cosa hábil, apto para aquello en que antes no lo era. La concepción del punto añade: Es hacer capaz, legalmente apto a una persona. Con éste concepto, puede determinarse el equilibrio mental del hombre bíblico y/o antropológico.
Incapacidad; ineptitud o carencia absoluta de lo que significa gobernar. Un gobierno que tiene todos los poderes a su favor, secuestrados y convertidos en sucursales ejecutivas,  especialmente y específicamente la AN, con una mayoría oficialista y con complejo de focas amaestradas para un espectáculo de circo. Sí, la AN es un circo y una mascarada para hacer creer en el extranjero que aquí existe democracia y que la AN, de alguna manera u otra,  pueda “trancarle el serrucho”. ¿Qué tanta necesidad se le antoja para obtener poderes especiales? ¡Esto me huele feo!
¿Plenos poderes? ¿Quiere hacerse creer a si mismo que el cuento se lo pueden tragar los ingleses, franceses, canadienses, norteamericanos, chilenos, brasileros, o los mismos vecinos colombianos? por supuesto que no, ni sus aliados chinos, rusos, nicaragüenses, iraníes, bolivianos, etc… se comen el cuento. ¿A quién engañan? Quizás un narcisismo oculto, cual espejo de la bruja mala de Blanca Nieves y los Siete Enanos, lo atormenta noche y día.
La prostitución política o, lo que es bíblicamente “venderse por un plato de lentejas” es el orden que pulula en el ambiente. No hay otra razón para pensar que se nos avecina un lúgubre y oscuro panorama. No se necesita ser brujo o profeta del desastre para ver más allá de las narices ¿Qué puede suceder con estos plenos poderes? (a) abuso de autoridad o, borrar del mapa la disidencia, (b) aumento de corrupción, (c) por si fuera poco, un canibalismo político entre ellos. Se vislumbra posiblemente saltos de talanquera, porque aun existe gente honesta dentro de la AN, y aun existen diputados obligados por las circunstancias y mucho miedo a represalias, pero de que sucede, sucede…
Los bajos instintos subyugados a la razón e inteligencia están haciendo desastre en un gobierno ilegal e ilícito. No existe otro concepto para catalogar semejantes onagradas. Los cachazos del antecesor eran producto de una colérica rabia anti imperialista, antiburguesa y antiterratenientista. Pero, el sucesor es otra cosa, como lo dice un proverbio coloquial “…a éste no se le consigue orilla…” en su incoherencia y desconocimiento total para gobernar…
Soy un sexagenario y pico, nací y viví en la dictadura de MPJ, he visto correr demasiada agua debajo del puente, he vivido unas cuantas elecciones presidenciales en verdadera democracia hasta hace catorce años  y, tengo razones para proponerme a mí mismo, ver una Venezuela libre y de los venezolanos… (eslogan adeco). Amén. Que así sea y, así será. Más sabe el diablo por viejo, que por diablo.