Es placentero caminar con un cuaderno y una pluma oteando cosas nuevas, auscultando el alma del paisaje, de la gente y de uno mismo; ver cómo germinan las ilusiones, cómo terminan, cómo luchan,se enferman, envejecen y mueren las cosas vivas de este mundo, cuyos anhelos y fugas quedan al final extinguidos como cirios que aletean al viento.
Cada noche nos refugiamos en el sueño, fugados de la realidad. Ilusiones y fugas forman parte del existir, uno y otro se necesitan así como las colinas necesitan tener manantiales, la roca musgos adheridos, las cascadas agua y las flores mariposas.
En este oficio se aprende a describir o narrar la escena que uno ve, la emoción que uno siente y el hecho tal cual uno lo comprende. Utilizamos la belleza literaria como expresividad para llegar al alma de los otros.
La vida es un eterno querer tener y ser feliz, tenencias que para lograrlas hay que fugarse de algo o de alguien.
En cada uno de nosotros sobre todo cuando las circunstancias son adversas, surge el deseo de cambiar de sitio, de casa, de trabajo, de pareja, de gobierno, de rumbo, de manera de ser, de estética, de look. Cambiar básicamente es la necesidad que acompaña al hombre hasta el final de sus días.Las adversidades obligan a ponerse en acción para apacentar angustias y temores. Por eso viajamos, nos vamos a otra parte momentáneamente o por tiempo indefinido, nadie está libre de querer fugarse de lo que le incomoda, le fastidia, le enferma, le oprime.
A veces necesitamos estar solos, zafarnos de los yugos insoportables de las horas fijas, del despertador, de las llamadas, de las infames colas, la presión de la familia, celulares, destino fijo, deberes, vecinos inquisidores. En ocasiones el ser humano huye presionado por el grito de sus sentidos.
Sueños, luchas y fugas es lo que más guarda el cuaderno y la memoria de los que escriben.
La filosofía de fugarse consiste en la capacidad que se tiene de evadirse,experimentar y ver otras cosas, otra gente, desconectarse de lo rutinario, de los hechos, de lo material, buscar un lugar tranquilo, sin ruidos y descansar.
El equipo que se necesita para la fuga es decidir, tener una aptitud especial en el pecho, una idea y un enfoque personal bajo las cejas. Lo importante de la filosofía de la fuga es saber que contamos con ánimo para disfrutar, corazón para sentir,valentía para dar el paso, ojos para ver.
En este oficio se aprende a captar con más facilidad todo eso que siente el ser humano, los animales y lo que refleja la naturaleza; motivos que impulsan a no dejar que se escape el momento que llega al alma,la sacude,impulsándonos a escribir unos renglones y darles vida, de la misma manera que damos vida a las ideas que arden perennemente en el cerebro.
Uno aprende a mirar el mundo desde una vista diferente, por lo tanto escribir también es fugarse del mundo rutinario, es adentrarse en el mundo de la fantasía, contar con el humor y la ironía, conocerla intimidad celeste de los altos espíritus, aprender a echar la red y llenarla de luceros. Somos andariegos infatigables, árbitros del peso de un suspiro,conocemos los incendios que producen los abrazos en el alma, hemos visto las obras labradas por la mano del viento y del tiempo, somos raíz, limo, tierra callada, volcán, pólvora, alas, también somos amor, protesta, somos fuga.
“El retirarse no es fugarse, ni el esperar es cordura, cuando el peligro sobrepuja la esperanza” (M. de Cervantes)
[email protected]
