Nelson Darío Franco (48), tenía más de un mes hospitalizado en el Antonio María Pineda, porque el 31 de diciembre se había quemado con agua caliente y la mañana de ayer falleció.
Los gritos de una de sus hermanas invadieron la morgue del Hospital Central, quien reprochaba al hoy occiso que por qué no la había esperado. La mujer entre llantos y luego de confirmar la muerte de su hermano, indicó que anoche estuvieron otros familiares quienes se turnaban para su cuidado, lo habían dejado bien, hablaba, comía y se estaba recuperando, inclusive lo habían cambiado para el área de observación.
La señora indica que su hermano quien padecía de trastornos mentales, residía en la calle 53 con San Vicente, donde vivía con otra hermana, ese día se encontraban haciendo hallacas, él para ayudar quiso bajar la olla de la cocina y el agua caliente le cayó sobre su cuerpo.
Desde ese entonces estaba recluido en el principal centro asistencial de la ciudad, donde se recuperaba y la mañana de ayer los tomó por sorpresa la muerte de Franco.
