La joven de 20 años detenida en agosto de 2024 en el contexto de las protestas postelectorales tras las elecciones presidenciales del 28 de julio, falleció el pasado sábado 10 de mayo en el Hospital de San Carlos, estado Cojedes.
Ariadna Pinto había sido excarcelada en diciembre tras presentar complicaciones médicas asociadas a la diabetes tipo I y, posteriormente, insuficiencia renal. Diversas organizaciones defensoras de derechos humanos han confirmado su deceso y solicitan esclarecer las condiciones que rodearon su detención y tratamiento médico.
Protestas postelectorales
Pinto fue arrestada el 1 de agosto de 2024 en Tinaquillo, estado Cojedes, por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), luego de que una jefa de calle de la Unidad de Batalla Bolívar-Chávez (UBCH) la señalara por presunta incitación al odio y terrorismo.
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Diagnosticada con diabetes tipo I desde los 10 años, la salud de Ariadna comenzó a deteriorarse durante su permanencia en custodia. El Comité por la Libertad de los Presos Políticos (Clippve) informó que el 12 de agosto Pinto fue ingresada en el Hospital Joaquina de Rotondaro de Tinaquillo por hiperglucemia severa, pero posteriormente fue regresada al centro de detención sin tratamiento prolongado.
El 1 de septiembre, su glicemia volvió a superar los 400 mg/dL, lo que requirió una nueva hospitalización.
Crisis de salud prolongada
Tras varios reportes y denuncias públicas, el 7 de diciembre de 2024 fue excarcelada por motivos de salud. No obstante, su estado seguía siendo delicado. De acuerdo con el Clippve, Ariadna fue ingresada en el Hospital de San Carlos, donde fue diagnosticada en febrero de 2025 con insuficiencia renal crónica. Su madre, Elizabeth Pinto, había solicitado medidas humanitarias desde los primeros días de detención.
Pinto permaneció hospitalizada durante varios meses. El 27 de abril sufrió una nueva recaída, y finalmente falleció el 10 de mayo por un paro respiratorio, según informaron sus familiares a la ONG.
Muertes de detenidos bajo custodia
La muerte de Ariadna Pinto se produjo una semana después del fallecimiento de Lindomar Amaro Bustamante, quien se quitó la vida en la cárcel de Tocorón tras denuncias de maltrato. Organizaciones como el Clippve y el partido político Voluntad Popular han solicitado justicia y reparación para la familia de Pinto.
También han reiterado que otros ciudadanos, como Amado Ramón Villega, Amado José Villega González y Freddy José Flores Acosta, permanecen detenidos en condiciones similares, al igual que el alcalde de Tinaquillo, Fernando Feo, recluido en El Helicoide.