La Federación de Centros Universitarios (FCU) de la Universidad Central de Venezuela (UCV) alzó su voz este miércoles a través de una protesta pacífica frente al Ministerio de Educación Universitaria, donde un grupo de estudiantes encabezado por Ariel Pérez, secretario de Derechos Estudiantiles de la FCU-UCV, entregó un documento con exigencias concretas para mejorar la calidad de vida de más de 30.000 estudiantes.
La movilización se realizó de forma pacífica y estuvo compuesta por alumnos de diversas carreras, quienes expresaron su preocupación por la grave situación que atraviesa la comunidad estudiantil, afectada por deficiencias estructurales que impactan su bienestar y su derecho a una educación digna.
Principales exigencias de los estudiantes:
- Aumento urgente de las becas estudiantiles, calificadas como “miserables” por los manifestantes, al no cubrir ni las necesidades básicas.
- Ampliación y dotación del servicio de comedor, actualmente limitado a solo 1.000 usuarios, en una universidad con una población de aproximadamente 30.000 estudiantes.
- Renovación y aumento del parque automotor universitario, ante la escasez de unidades de transporte que imposibilita el traslado regular de los alumnos.
- Financiamiento inmediato para la jornada de carnetización, cuya paralización afecta el acceso a múltiples servicios universitarios.
En su intervención, Ariel Pérez fue enfático al señalar que la protesta responde al silencio sostenido por parte del ministro Ricardo Sánchez ante múltiples solicitudes previas:
“Desde la Secretaría de Derechos Estudiantiles de la FCU hemos enviado comunicaciones constantes. Incluso pedimos a la ministra de Ciencia y Tecnología que intercediera. Pero lo único que hemos recibido como respuesta es silencio absoluto”, declaró Pérez.
Un llamado directo al ministro
“Si no quiere recibirnos en su despacho, lo invito a reunirse en la oficina 3 de la Secretaría de Derechos Estudiantiles. Los estudiantes no pedimos discursos, exigimos respuestas”.
Durante la jornada, los jóvenes insistieron en que la lucha no se trata únicamente de beneficios materiales, sino de la defensa del derecho humano a una educación accesible y digna, en condiciones adecuadas.
“No solo queremos estudiar, queremos hacerlo en un ambiente que facilite nuestro aprendizaje y crecimiento personal”, reiteró Pérez frente a los presentes y medios de comunicación.
La FCU-UCV dejó claro que mantendrá la presión institucional y pública hasta obtener respuestas concretas por parte del Ejecutivo, y exhortó al Gobierno Nacional a abandonar la indiferencia frente a las necesidades reales del sector universitario.