En un acto cargado de emotividad y firmeza, el Colegio Nacional de Periodistas (CNP), el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y el Círculo de Reporteros Gráficos rindieron homenaje a la labor y valentía de los periodistas venezolanos, al tiempo que exigieron la liberación de los 20 profesionales y trabajadores de los medios que permanecen detenidos en el país.
La Casa Nacional del Periodista fue el escenario de este encuentro que congregó a comunicadores, representantes de organizaciones civiles, líderes de la Iglesia y familiares de los periodistas encarcelados, quienes compartieron el dolor y la preocupación por la situación de sus seres queridos.
Alarmante cifra
Marco Ruiz, secretario general del SNTP, alertó sobre el drástico deterioro de las condiciones para el ejercicio de la prensa libre en Venezuela. Denunció que al menos 40 periodistas y trabajadores de la prensa se encuentran judicializados: 20 encarcelados, 12 bajo medidas cautelares y otros 8 enfrentando interrogatorios o evadiendo órdenes de detención.
Ruiz enfatizó el uso «ilegal y arbitrario de las leyes antiterrorismo» como una herramienta para silenciar a periodistas y comunicadores, calificándolo como una política estatal de intimidación y censura. «El periodismo se hace con valentía, con compromiso y con una profunda consciencia ciudadana. Pero en Venezuela la valentía ha sido castigada, el compromiso con la verdad ha sido encarcelado y la consciencia está siendo perseguida», sentenció Ruiz, asegurando que este es el marco en el que se dan las detenciones y la persecución.
El secretario general del SNTP reiteró el compromiso de las organizaciones gremiales en la lucha por la liberación de los colegas detenidos, pero también por la seguridad de quienes continúan reportando en las calles, por aquellos que trabajan en condiciones precarias y por quienes se han visto forzados a abandonar el país.
Este acto se enmarcó en la campaña #ElPeriodismoCuenta, una iniciativa del SNTP que busca visibilizar las detenciones arbitrarias y exigir la libertad de quienes están tras las rejas por informar y opinar. La campaña subraya la importancia del periodismo como pilar fundamental para la defensa de la democracia, el acceso a la justicia y la construcción de la memoria histórica.
Por su parte, Tinedo Guía, presidente del CNP, expuso la relevancia del quehacer periodístico y recalcó la importancia de la libertad de pensamiento para la preservación de las democracias. «Querer conculcar la libertad es la torpeza más grande que se puede cometer porque a ella y por ella se aboca la comunicación social», afirmó, haciendo votos por la liberación inmediata de los trabajadores de los medios detenidos.
Un clamor eclesiástico
Un momento significativo fue la participación de monseñor Ovidio Pérez Morales, obispo emérito de la Diócesis de Los Teques, quien abogó por la liberación de los periodistas y de todos los ciudadanos privados de libertad por razones políticas.
En nombre de la Iglesia, Monseñor Pérez Morales propuso que la próxima canonización de los primeros dos santos venezolanos, la Madre Carmen Rendiles y José Gregorio Hernández, sirva como una mediación para la liberación de los presos políticos en Venezuela, «especialmente de los trabajadores de medios detenidos por informar». «Canonización sin presos políticos, canonización sin comunicadores sociales presos, ¿por qué? Porque la canonización es una fiesta creada en torno a generar el rejuvenecimiento de los mejores valores de la convivencia humana», enfatizó.
Homenaje conmovedor y clamor familiar
Uno de los instantes más conmovedores del evento fue el despliegue de una gigantografía en la fachada de la Casa Nacional del Periodista, con los nombres y rostros de los 20 trabajadores de la prensa detenidos. Mientras se abría la pancarta, el himno nacional resonó como un emotivo homenaje a quienes hoy permanecen tras las rejas.
Familiares de periodistas como Nakary Ramos, Gabriel González, Carlos Julio Rojas, Ángel Godoy y Luis López estuvieron presentes, compartiendo con profundo dolor el proceso de criminalización que han vivido sus seres queridos y denunciando contundentemente las violaciones al debido proceso.
El acto concluyó con un enérgico llamado a la solidaridad internacional y un pedido a mantener la atención sobre la grave situación de los periodistas presos en Venezuela.