En cada rincón venezolano se celebra la llegada del Niño Dios y un sinfín de tradiciones se despliegan en todo el territorio nacional. Diciembre comienza con alegría y el venezolano disfruta esta época intensamente, entre música, reuniones, brindis y deliciosos platos tradicionales.
No hay hogar que no comparta una hallaca, un ponche crema, el pan de jamón y la ensalada de gallina, entre bailes y regalos que bajo el luminoso arbolito, aunque ajeno a la cultura venezolana, se ha convertido en un icono de las festividades de estas tierras.
Algunos, no olvidan el emblemático pesebre y desde llegado el mes de noviembre comienzan a armar una gran montaña de papeles de colores que llevan al lugar donde María y José cobijan al pequeño Jesús en una cuna de paja, entre la mula y el buey.
Existen diferentes expresiones culturales, gastronómicas, musicales y tradicionales que identifican la celebración de la Navidad en Venezuela. Estas celebraciones tienen una gran fuerza pues encierran innumerables reuniones colectivas que hacen que las fechas decembrinas sean muy especiales.
En las escuelas y liceos del estado la costumbre es celebrar el inicio de la Navidad reuniendo a toda la comunidad educativa. Los más pequeños son los protagonistas con la realización de los hermosos pesebres vivientes, en los cuales se recrea la llegada del Niño Jesús al mundo, en una representación que incluye cantos tradicionales y sobre todo la inocencia de los niños en edad preescolar que desde temprana edad son inculcados con los valores de la fe y las costumbres navideñas.
En el Colegio Rosa y Carolina Agazzi, la Navidad llegó con los alumnos de la etapa preescolar y maternal, quienes personificaron un pesebre viviente organizado por la coordinación de Educación Inicial. Una muy original adaptación de la historia de la Navidad, pero con un toque tradicional, elementos de la cultura autóctona, gaitas y canciones propias de nuestro país, en la cual participó un grupo de docentes y la directiva del plantel, junto a los padres y representantes.
En esta oportunidad el pueblo que acompañaba al Niño Jesús era completamente llanero y los tres Reyes Magos entregaron como ofrendas dulce de lechosa, hallacas, pan de jamón, perinolas, papagayos y metras, junto a un potpurrí de aguinaldos tradicionales.
Los pequeños alumnos del Instituto de Educación Inicial Ronda, también presentaron una obra navideña, con la participación de 180 alumnos de preescolar y maternal en una hermosa representación del nacimiento de Jesús.
Celebraciones llenan de calor humano las fiestas navideñas, que si algo tienen característico es ser un período donde la reunión familiar, la solidaridad y los valores humanos se apoderan de nuestras almas, entonces Venezuela se hace aún más cálida y da paso a la entrega de un periodo que se cierra para recibir otro nuevo lleno de esperanzas y nuevos sueños por realizar.
Toma cultural
De igual forma, en la Escuela Pablo Acosta Ortiz, estudiantes del Colegio Fermín Toro organizaron una toma cultural con los niños de 1 a 5 grado de educación básica, en el cual dieron la bienvenida a la temporada decembrina con bailes tradicionales, degustación de gastronomía típica navideña y confección de gorros y adornos alusivos a la época.
Ana José Cárdenas de Torres, coordinadora de la actividad, destacó que el objetivo es rescatar las tradiciones típicas venezolanas a través de actividades culturales y recreativas.
“Los niños participan directamente con las estudiantes y aprenden a través de la práctica en las estaciones de elaboración de adornos y gorros navideños y cerramos con el cuento de Navidad. Este tipo de actividades son de gran importancia para retomar todas las tradiciones en tiempos donde la tecnología y la información nos han quitado mucho de estas costumbres de la época navideña”.
Durante la jornada, los niños pudieron disfrutar de cuentos de Navidad, artes plásticas con pintura, dibujo y modelado, formación cultural y danzas.
En Santa Rosa
El pueblo de Santa Rosa se vistió de gala para recibir a niños y niñas de todo el estado Lara, quienes se congregaron en la Plaza Bolívar para fusionar sus dulces voces, habilidades para el baile y la actuación; elementos que dieron vida a una colorida fiesta cultural que tuvo como principal motivo dar la bienvenida a la Navidad a la tierra crepuscular.
Esta actividad fue organizada por la Zona Educativa, a través de su División de Cultura, de forma articulada con el Consejo Legislativo y la Corporación para el Desarrollo Jacinto Lara (Corpolara). Las palabras de apertura y bienvenida las dio la directora del ente educativo, profesora Gisela Cañizález, a los 600 estudiantes que participaron acompañados de sus docentes culturales, madres, padres y representantes.
Con representación de los municipios Andrés Eloy Blanco, Crespo, Iribarren, Jiménez, Morán, Palavecino, Simón Planas y Urdaneta, los niños por medio de la danza, el canto y la dramatización, dieron muestra de las manifestaciones culturales propias de cada una de estas localidades, entre las que destacaron el baile de Las Zaragozas de Sanare, de Los Pastores de San Joaquín y montajes con flauta, cuatro y de coros.
Los consejos comunales de Santa Rosa también se incorporaron a la celebración, la cual incluyó además villancicos, aguinaldos, escenificación de pesebres, estatuas y murales vivientes. La idea, fue dar a conocer a los presentes el trabajo teórico y práctico que día a día llevan a cabo en los planteles los maestros culturales junto a los escolares, sobre la base del rescate y la defensa de los valores y las tradiciones criollas.
Fotos: Dedwison Álvarez
