«Chávez murió a las 4:25 pm”, anunció en cadena de radio y tv, desde el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo, el entonces vicepresidente de Nicolás Maduro. Eran las 5:20 pm del martes 5 de marzo 2013. Según el jefe de la guardia presidencial, general José Ornella, falleció por un “infarto fulminante».
Hugo Chávez llevaba 1 año, 8 meses y 23 días batallando contra un cáncer que le detectaron en Cuba en junio 2011, tras operación de emergencia por absceso pélvico. Permaneció allá 70 días después de operado el 11 de diciembre y por cuarta vez. Y se agravó con problemas respiratorios.
“Llegaste de Cuba muerto”, dijo el mayor general de la Fuerza Armada Jacinto Pérez Arcay, a quien HCH identificaba como su maestro, en discurso en honor al Presidente en el Museo Histórico Militar.
En efecto, el capitán de corbeta Leamsy Salazar, durante 12 años jefe de seguridad y asistente personal de HCH, reveló que falleció en Cuba a las 5:32 pm del 30 de diciembre 2012. El testimonio del considerado por el comandante “humilde gran soldado de la infantería de marina”, aparece en el libro Bumerán Chávez: Los fraudes que llevaron al colapso de Venezuela, del periodista español Emili J. Blasco, corresponsal de ABC en EEUU, quien obtuvo el Premio Vocento por cobertura de ese hecho.
Según el citado libro se dio una “cuasi muerte cerebral”, manteniendo artificialmente con vida al paciente. Los Castro se hicieron dueños de la situación para entronizar a NM.
Con subordinación del tribunal de justicia (tsj) impusieron la continuidad de NM en la vicepresidencia y una segunda violación institucional cuando se oficializara la muerte de HCH. A Diosdado Cabello le correspondía como presidente del parlamento, asumir la jefatura de Estado. El castrocomunismo lo vetaba porque temía que impusiera en sus aspiraciones de candidato a la Presidencia, para lo cual contaba la nacionalidad colombiana NM. Hasta amenazaban publicar dossiers de narcotráfico de DC.
NM anunció que el presidente caminaba y hacía ejercicios; que había estado despachando 5 horas asuntos de Estado y leyó en Chile el 28 de enero una carta HCH dirigida a mandatarios de la Celac.
Una composición fotográfica fue considerada la publicada en el diario cubano Granma del 15 de febrero 2013, en la cual aparece leyéndolo con sus hijas mayores Rosa Virginia y María Gabriela.
A las 2:30 de la madrugada del 18 de ese mes, NM anunció el arribo a Maiquetía de HCH. Salazar dice que vio el cuerpo y concluyó que era el cadáver del presidente, aunque de llevar muerto mes y medio no estaba embalsamado.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, vino a visitar a HCH, pero no pudo verlo.
Para el autor del Bumerán Chávez sigue sin saber cuál es la versión verdadera: que HCH falleciera en Cuba entre el 29 y el 31 de diciembre 2012 o el 17 de febrero 2013; que ocurriera en el HMCA el 5 de marzo o en la misma fecha en la isla.
A la bibliografía deben agregarse los runrunes de Nelson Bocaranda y los libros El gran engaño: hipocresía y traición en la muerte de Chávez, de Pablo Medina, quien afirma que HCH está sepultado en Cuba; y El ocaso del comandante, de Ludmila Vinogradoff.
La sucesión presidencial en la revolución del siglo XXI está caracterizada por el misterio. Al caso HCH se suma la nacionalidad de su legatario NM, quien además de la venezolana, aun no comprobada, posee la colombiana. Así como a NM se le exige partida de nacimiento, al régimen tanto el de Cuba que lo impuso como el militarista de aquí, debe exigírsele la de defunción de HCH.
Almargen. Primer Poder debe dejar morosidad. Y tsj dejar doctrina maduriana: “ser cabeza de revolución judicial que sustenta el Estado que estamos construyendo”.
