La Corte Suprema de Justicia de Argentina dictó este martes 10 de junio una sentencia trascendental al confirmar la condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
De acuerdo a La Nación de Argentina, la decisión unánime del máximo tribunal, conformada por los votos de los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, ratifica la condena por el delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública, en relación con las 51 licitaciones de obra pública investigadas en la provincia de Santa Cruz. La Corte, sin embargo, mantuvo la absolución de la expresidenta por el delito de asociación ilícita, desestimando la solicitud de la fiscalía de agravar la condena.
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Este pronunciamiento tiene profundas repercusiones en el sistema político argentino. Cristina Kirchner, quien actualmente lidera el Partido Justicialista (PJ) y se erige como una de las principales figuras de la oposición al gobierno de Javier Milei, quedará formalmente inhabilitada para participar en futuras contiendas electorales, truncando sus aspiraciones de competir por una banca en la Legislatura bonaerense.
En un comunicado, los jueces Rosatti y Rosenkrantz, a quienes se sumó Lorenzetti, argumentaron que las sentencias previas se basaron en «profusa prueba producida» y en el Código Penal vigente, asegurando que «el debido proceso ha sido salvaguardado«.
Ante la noticia, el presidente Javier Milei celebró públicamente el fallo a través de sus redes sociales, afirmando que se había hecho «justicia» y destacando el funcionamiento de las instituciones republicanas.
Por su parte, la expresidenta, de 72 años, quien puede solicitar cumplir la condena bajo arresto domiciliario debido a su edad, aguardó el pronunciamiento de la Corte rodeada de dirigentes y militantes en la sede del Partido Justicialista.