La urbanización Dorante, en los alrededores de la calle 51, después de la avenida Pedro León Torres, es blanco de la delincuencia. A cualquier hora del día, los antisociales se disponen a atracar a cuantas personas pasan por ahí, intimidando especialmente a las mujeres.
Bertha Martínez, trabajadora del hogar, todos los días acude a uno de los conjuntos residenciales ubicado en la zona, con el propósito de ganar el sustento para sus hijos: lava y plancha la ropa, asea los pisos, entre otras funciones, para una familia donde presta servicio de mantenimiento desde hace diez años.
“En tres oportunidades, me han robado la cartera, en el trayecto de la parada de autobús hasta el apartamento donde trabajo. Se aprovechan de las calles solitarias para quitarnos el poquito dinero que tenemos encima; esperamos por patrullajes en la urbanización”, dijo la trabajadora del hogar.
En motos o caminando, se acercan hasta los vecinos que frecuentan el urbanismo. Los vecinos están alarmados por los numerosos asaltos cometidos en lo que va de año. En este sentido, solicitan la atención de los organismos de seguridad a fin de que desplacen por completo al hampa.
¿Asfalto Parejo?
Aunado a la inseguridad, existen problemas con la vialidad. Huecos en diferentes tramos de la urbanización Dorante, perjudica el recorrido los carros particulares, al ocasionarles daños en el tren delantero y otras piezas mecánicas.
Desde hace varios meses, los residentes esperan la rehabilitación de las vías, pero aún no llega el plan municipal Asfalto Parejo. Por lo pronto, los conurbanos utilizan vías alternas para llegar hasta los edificios y viviendas del urbanismo.
Otras familias, con mayores posibilidades económicas, reparan la capa asfáltica frente a sus residencias. No obstante, hace falta la inversión oficial.
Foto: Jairo Nieto