Una testigo aseguró que un autobús que transportaba a periodistas que cubren los Juegos Olímpicos fue impactado por disparos y no rocas, como afirman los organizadores de las justas en Río.
El incidente se registró la tarde del martes cuando el vehículo se dirigía de una sede olímpica en el norte de la ciudad al área del Parque Olímpico en un suburbio del oeste de Río. Dos ventanas del autobús fueron quebradas.
Los organizadores de las justas informaron el miércoles por la mañana que un análisis preliminar muestra que el autobús fue atacado con rocas en lo que consideran un acto de vandalismo.
Sin embargo, Lee Michaelson, una capitana retirada de la Fuerza Aérea de Estados Unidos que cubre las actividades del equipo estadounidense de básquetbol de mujeres y quien viajaba en el autobús en el momento del incidente, se dijo molesta de escuchar que los organizadores hablen de un ataque con rocas y no con balas. Subrayó que se podían ver claramente los «orificios de impacto de bala en las ventanas».
En respuesta, el vocero de los Juegos, Mario Andrada, insistió en que las autoridades no están ocultando los hechos.
La seguridad ha sido uno de los motivos principales de preocupación en los Olímpicos, donde 85.000 soldados y policías han sido desplegados _el doble de los que vigilaron los Juegos de Londres hace cuatro años.
