En múltiples oportunidades se ha denunciado la contaminación reinante en los alrededores del puente Macuto y especialmente en lecho del Río Turbio, pero a pesar de estos señalamientos, esos espacios se siguen utilizando para arrojar cualquier tipo de desperdicios sin importar la contaminación que esa acción genera.
El tramo de la avenida Argimiro Bracamonte entre la Venezuela y la avenida Críspulo Benítez Fonturvel además de la polémica que genera por el llamado tema del "Triángulo del Este" presenta otra cara, y es que se ese amplio espacio lo que denota es descuido y abandono, situación que no beneficia estéticamente a la ciudad.
Entre la Ruezga Norte y Sur hay un puente que es el principal paso que comunica a ambas comunidades y que como se ha visto en otros sectores de la ciudad, se encuentra lleno de basura, escombros y otros desechos sólidos que son arrojados debajo del mismo de manera indiscriminada.
En la entrada de la urbanización Luis Hurtado Higuera por la carrera 6 que demarca los límites de Andrés Eloy Blanco y Santa Isabel, se vive una situación bastante irregular ante la presencia de unas alcantarillas rotas y tapadas de basura que lejos de cumplir con su función, lo que hacen es crear molestias y angustias a los habitantes de ese sector.
A la llegada de las precipitaciones la enorme zanja dejada en la carrera 24 a la altura de la calle 9 se convierte en un problema bastante molesto. Aquí los conductores tienen que adivinar para no pasar sobre los huecos que son tapados por el agua de las lluvias y no causar daño a sus vehículos.