Las declaraciones de advertencia de la ministra de Educación Universitaria, Yadira Córdova, sobre un eventual plan desestabilizador por parte de las universidades autónomas y experimentales que sumaron al paro de 48 horas, tienen sin cuidado a los trabajadores del sector en el estado Lara, quienes el miércoles se concentraron en el oeste de la ciudad para reiterar que sus peticiones reivindicativas nacen de la preocupación por la calidad de la educación y de vida.
Obreros, administrativos y docentes de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL-IPB), la Universidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo) y la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), acataron las últimas 48 horas del paro de forma activa, con una concentración y cierre de vías en el Decanato de Ciencia y Tecnología, conocido como núcleo Obelisco, y con la entrega de volantes informativos en la intersección de la avenida Florencio Jiménez con avenida La Salle.
En los volantes que repartieron los trabajadores de la UPEL y la Unexpo, en la avenida La Salle, se leía: «Exigimos a la profesora Yadira Córdova», lo siguiente:
-Respeto a las Normas de Homologación y a la Normativa Laboral.
-Aumento de sueldo.
-Pago de prestaciones sociales de los años 2008, 2009, 2010 y 2011.
-Pago de intereses de prestaciones sociales desde 1998 al 2011.
-Presupuesto universitario justo que, entre otras cosas, permita garantizar la construcción de infraestructuras para nuevas carreras.
-Mejoramiento de las unidades de transporte.
-Garantía de la seguridad social.
Tales peticiones forman parte de los derechos laborales de todos los trabajadores, «por lo tanto, exigir que se cumplan esos derechos no es desestabilizar», aseveró Deborah Velásquez de Valecillos, presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA (Apucla), quien se encontraba en la concentración de los trabajadores de esa institución, realizada en el núcleo Obelisco.
«Aspirábamos a que el escenario cambiara la semana pasada con la movilización a la Vicepresidencia, pero ocurrió lo mismo de siempre: fuimos atendidos por funcionarios que no tienen poder de decisión».
Destacó que en estos dos días el paro ha sido acatado de forma satisfactoria, seria y responsable. «Las suspensiones de 48 horas continuarán cada semana hasta el 23 de junio, de allí se decidirá en el directorio de Fapuv, que se llevará a cabo en Barquisimeto, cuáles serán las próximas acciones a seguir, dado que no hemos descartado la hora 0». El próximo paro serán los días 11 y 12 de junio, según Velásquez la contundencia de las acciones dependerá de la participación unida de todos los sectores que hacen vida en la universidad. En ese sentido, Rubén Darío Albornoz, presidente de la Asociación de Trabajadores Administrativos (Ataucla), invitó a los estudiantes para que se sumen a la lucha.
«Estamos peleando por la universidad, no solo por las reivindicaciones para los trabajadores… no es posible que existan carreras sin una sede propia, a lo cual se suma el deterioro de la planta física, los problemas del transporte, el comedor, los equipos tecnológicos y las sillas ergonómicas, por ejemplo».
Destacó que la idea es reanudar el diálogo con el sector oficial para poder exponer las necesidades de cada uno de los sectores.
Respuestas urgentes
Eduardo Mendoza, presidente de la Asociación de Profesores de la UPEL- seccional Lara, expresó que las respuestas de parte del Ministerio de Educación Universitaria y del Gobierno nacional son urgentes.
«El año pasado comenzamos a reclamar el pago de deudas pendientes y ahora luchamos principalmente por un incremento salarial justo, dado que nuestro salario ha mermado por el alto índice inflacionario».
El docente expresó su rechazo a las declaraciones oficiales de la ministra Córdova, en las que buscan vincularlos con la lucha política. «Queremos ratificarle a la comunidad, en especial a los estudiantes, que nuestra lucha es reivindicativa y salarial… no política, como lo quiere hacer ver el Gobierno para evitar darnos respuestas». La universidad va mucho más allá de las clases, «por eso nos mantendremos firmes para forzar al Gobierno que nos dé respuestas».
Fotos: Daniel Arrieta
