#Opinion: Parafraseos Por: Ramón A. Querales

Parafraseos
•Mi esposa y yo visitamos Cuba a finales de los ochenta. Durante la estadía hicimos buena amistad con una joven cubana a quien la invitamos a comer helados en una famosa heladería llamada Coppelia. Cuando llegamos, nos sorprendió el lujo del lugar pues hasta los helados eran servidos en copas de cristal. Sin embargo, nos esperaba ¡tremenda segunda sorpresa! ¡Nuestra amiga cubana no podía entrar! El sitio era exclusivo para los turistas. Sin darnos tiempo a reaccionar, un joven en uniforme nos señaló hacia otro ambiente, que por su humildad, contrastaba enormemente, con el que teníamos en frente.
Muy amablemente nos sugirió: ”Si quieren que la camarada les acompañe, ese es el lugar reservado para los cubanos”. Nuestra amiga, con una tristeza en su rostro, y una vergüenza en su alma, exclamó: ”No importa, si quieren nos regresamos al hotel” (donde tampoco la dejaban entrar). Decididos a cumplir con la invitación le dijimos: ”No señor, nosotros te invitamos y vamos a comernos los helados donde se los comen los cubanos”. Y así lo hicimos. Quiera Dios que esa empresa –Coppelia- que ha llegado ahora a Venezuela, con el correr del tiempo, no nos discrimine también a nosotros los venezolanos pensando que somos cubanos. Aunque para Raúl, y no lo digo de manera jocosa, nos pueden meter en el mismo baúl, porque Cuba y Venezuela somos una misma cosa.
•Hay un barrio muy famoso en Petare (Caracas) muy orgulloso de su gentilicio. Se llama “La Dolorita”. El barrio puja que puja por su sobrevivencia frente a tanta delincuencia
•Los segmentos “D” y “E (80% de la población) muy inteligentemente se fusionaron en uno solo: el “de” ¿Para qué? Para que el gobierno les dé. Es así como en las elecciones exigen con el dedo: ”Deme esta nevera. Deme esta lavadora, que yo se lo doy” (el voto, se entiende). Por ahí viene el profeta Elías (Jaua) en flux de San Nicolá pero sin bufanda, a ver quien ofrece más, entre él y El Niño eꞌ Miranda
•Es inútil esperar que cuando se carece de conciencia pueda haber remordimiento de ella
•Las cicatrice más difíciles de sanar son las internas. Políticamente hablando no queremos más elecciones “sospechosas”. Dígalo ahí, alcalde Ledezma
•Si alguien me preguntase si yo quiero ser rico le contestaría: ”Depende”. Porque si voy a serlo para que la riqueza me convierta en esclavo, prefiero ser pobre pero libre. El dinero podrá ser muy bueno en el bolsillo pero malísimo en el corazón
•“La barriga de Shakira será una hincha más para el Barcelona y yo piqué adelante poniéndosela”, diría
su flamante papá
•¿Será que la rectora Socorro pudiese servir de auxilio a la oposición para que el CNE quite el botón del entubado?
•Aunque, a uno lo entuban generalmente cuando está de terapia intensiva y éste no es el caso opositor
•La diferencia entre un optimista y un pesimista es que el primero ve las crisis como oportunidades y se acerca y el segundo las oportunidades como crisis y se aleja
•Ojalá que la reelección de Obama esta vez sí medio oriente a los árabes e israelíes
•Sólo se vive una vez pero al desaprovechar esa única oportunidad que la vida nos brinda, anhelamos vivir más, para ver si logramos una segunda. Tarde piamos para no andar lontano
•La torpeza más grande como conductores es pensar que no necesitamos de unos buenos frenos porque tenemos tremendas cornetas. No siempre basta con hacer “piipii”
•Los narradores matutinos de noticias por radio y TV comienzan con un “Buenos Días tengan todos” para de seguida acribillarnos con un arsenal de malas nuevas. Qué manera de empezar un nuevo día.
•Cuando vayas al supermercado, con tu listica en la mano, no olvides por favor hermano, este tranquilizante legado:”Eso es lo que hay”. Por ejemplo, ahora tu tienes que “Colgate” de la única marca de pasta dental, y se te hace difícil surfear con una sonrisa Pepsodent en la Crest(a) de la ola, sabiendo que de carambola, sólo aquella podrás llevar
•Entonces decíamos en anterior entrega que este servidor en su niñez sirvió de monaguillo. Y casi que también de seminarista. Por cierto, las misas, oficiadas por el padre Cubano( de quien hablaremos en otra ocasión ) Carlos Madrigal Pentón( no Pintón)eran en Latín y de espaldas al público. Yono hablaba latín pero igual se las contestaba en esa lengua:El decía “Dominusvobiscum” y yo le respondía”Et cum spiritutuo”. El hecho de que la celebración fuesede espaldas al público, y en latín, tenía sus partes positivas. Por ejemplo, cuando no había feligreses nosotros ni asomo de tristeza porque no nos dábamos cuenta de que estábamos solos. Tampoco notábamos si alguien estaba dando conciertosde bostezos que invitasen a uno al zzzz…Por lo demás, cuando yo metía la pata en latín, pues ¡qué iban los feligreses a saberlo!¡Si apenas hablaban dialecto aguadense! Pero, para que Uds. vean, ¡Cómo cambian los tiempos! Ahora las misas las ofrecen los sacerdotes de frente y en Español , y es la feligresía quien, al no asistir, le da la espalda a ellos y a la Iglesia. Paterdimitteillis non enimsciunt quid faciunt (Perdónalos, Padre porque no saben lo que hacen) A mi no me importaría si se alejasen de misa para ir a encontrarse con Dios en otra partepero n usualmente no es lo que sucede.