Los zancudos han invadido los pabellones del Hospital Central Antonio María Pineda (Hcamp), una situación que para los residentes, especialistas e internos del centro ya es sumamente preocupante, al punto en que los insectos perturban las actividades operatorias y se han visto inclusive, chupando la sangre de las compresas utilizadas en las cirugías.
Esta denuncia se suma a las diversas necesidades del centro asistencial que además de las deudas salariales, han alentado el conflicto que luego de un mes han mantenido los médicos del Hcamp, con la paralización de las intervenciones electivas y consultas externas.
“No tenemos respuestas ante las peticiones realizadas, no solamente de los pagos, sino aún más grave de la dotación de insumos, medicamentos y material médico quirúrgico que necesitamos para poder atender a los pacientes que llegan al hospital”, expresó el Dr. José Manuel García, presidente de la Sociedad de Médicos Internos y Residentes del Hcamp y el Hupaz.
En fotografías recogidas por los mismos médicos, se evidencia cómo los pabellones se encuentran repletos de zancudos, sin que las autoridades se dignen a llevar siquiera un equipo de fumigación, Tampoco pueden realizar la limpieza semanal de estos espacios, debido a que no cuentan con suficientes quirófanos para cerrarlos por algunas horas y hacer el mantenimiento correspondiente.
Destacaron el mal funcionamiento de las plantas eléctricas. Hace algunos días, debido a un apagón que afectó el hospital, en plena operación se quedaron a oscuras y para poder culminar la intervención se valieron de las linternas de sus teléfonos celulares.
“La situación es grave. Así terminen de pagarnos las deudas del aumento salarial, los problemas continuarán si no se atienden las necesidades que tiene el hospital. Hay días en que no tenemos compresas para poder operar las emergencias y los familiares deben salir de madrugada a comprar estos insumos para poder hacer la intervención, arriesgando la vida de los pacientes en la espera”, comentó la Dra. Karla Izarra, médico cirujano.
Luego de un mes de conflicto, los médicos del principal centro asistencial de Centroccidente, estudian nuevas acciones para radicalizar la protesta y mostrar a la colectividad la realidad del hospital y las deficiencias que poseen en los diferentes servicios.
Para el día de hoy, desde las 10:00 de la mañana, organizan un potazo a las afueras de la institución, con el fin de reunir recursos para entregarlos a la dirección del hospital y comprar los insumos más básicos y necesarios, muchos de ellos deben ser solicitados a los pacientes porque no se encuentran en los depósitos del Hcamp.
“Queremos atender a los pacientes sin tener que pedirles ni una inyectadora y sin arriesgarles su vida por no encontrar a altas horas de la noche un insumo en la calle”.
Ayer se ratificó la asamblea permanente y el paro continuará con la tramitación del pliego conflictivo por parte del Colegio de Médicos del estado Lara.
