El dirigente político, Alfredo Ramos, se unió a las voces de protesta en el Día del Trabajador, durante la concentración convocada por gremios y sindicatos de Lara.
En sus declaraciones manifestó: «El día de ayer Maduro se burló nuevamente de los trabajadores y de los jubilados y pensionados al otorgar un miserable aumento en el bono de guerra económica», afirmó Ramos, destacando la profunda insatisfacción, que según indicó, generó la medida entre la clase trabajadora.
El exalcalde de Iribarren hizo hincapié en el incumplimiento del artículo 91 de la Constitución, que establece un salario mínimo suficiente para garantizar una vida digna. «Los salarios siguen por debajo de lo que establece el artículo 91 de la Constitución. Menos de dos dólares es el salario mínimo», subrayó Ramos.
Ramos fue contundente al señalar las consecuencias de los bajos salarios en la desaparición de beneficios laborales fundamentales. «Eso significa en la práctica la desaparición del salario, la desaparición de la contratación colectiva, de las prestaciones sociales, de las hospitalidades, de los aguinaldos», explicó, destacando el impacto negativo en la calidad de vida de los trabajadores.
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En este contexto, Ramos resaltó el papel crucial que juegan los trabajadores en la lucha por sus derechos. «Por eso los trabajadores juegan un papel fundamental en lograr mejorar sus condiciones laborales», enfatizó Ramos, alentando a la movilización y la organización para exigir salarios justos y condiciones dignas.
Finalmente, reafirmó el compromiso de continuar la lucha en las calles. «Seguimos en la calle», concluyó, sumándose al clamor generalizado de los trabajadores que exigen un cambio en las políticas salariales y laborales del país.
