Desde la avenida Venezuela, frente a la Catedral Metropolitana de Barquisimeto, se congregaron este jueves 1 de mayo representantes y miembros de diversos gremios y sindicatos del estado Lara para conmemorar el Día del Trabajador y alzar su voz en demanda de ajustes salariales y reivindicaciones laborales.
A pesar de la lluvia , los trabajadores se mantuvieron firmes en su protesta. «Al igual que los años anteriores, estamos acá para conmemorar el Día del Trabajador. Primero iniciando con una misa, dándole gracias a Dios», expresó uno de los dirigentes sindicales presentes. «Aquí estamos nosotros, con todos los trabajadores, dirigentes sindicales de más de 25 gremios, y a pesar de la lluvia, nosotros seguimos en pie de lucha, trabajando por un mejor salario, luchando por contrataciones colectivas, luchando por que el trabajo de nuestros afiliados sea el mejor remunerado, con la contratación colectiva».
Los manifestantes hicieron un llamado a diversos sectores del gobierno y las empresas, para que escuchen sus demandas. «Nosotros estamos luchando por nuestros beneficios y los de sus familiares, no es por nosotros nada más, es por los familiares de toda Venezuela que nosotros estamos acá el día de hoy, y por eso vamos a seguir insistiendo en abrir las puertas que se nos están cerrando», enfatizaron.
En un tono enérgico, los trabajadores dejaron claro su carácter pacífico y su legítimo derecho a protestar. «Nosotros trabajadores, no somos guerrilleros ni terroristas, estamos reclamando nuestros justos derechos, así que pacíficamente en la calle, no somos presos».
Las denuncias sobre la precaria situación económica y los bajos salarios fueron un punto central de la manifestación. «No solamente nos reduce a unos míseros salarios, sino que hoy, a través de su múltiple mecanismo, está impidiendo que este gremio santifique su día, su día de los trabajadores, el histórico día de todos los trabajadores de Venezuela y del mundo, y nos impida estar en la iglesia».
La crítica hacia las políticas salariales actuales fue contundente. «Vivimos hoy, como trabajadores que somos, que estamos todos en la precaria situación de un sueldo mínimo total no existente. Estamos aquí para hacerle un llamado a la población, al gobierno, que por favor, con un sueldo de 1.3 dólares se compren 100 gramos de carne. ¿Cómo se pretende que un trabajador vendía comida, miseria al mes? El gobierno puede hacer algo».
También se hicieron reclamos específicos sobre beneficios laborales, como el ticket de alimentación. «El beneficio de la sexta ticket no es retirarla al trabajador que se lo pida o que sale de reposo. Es un momento tan vulnerable que más la necesita, siendo de su parte, la Junta General. ¿Por qué se le niega? Que somete a la Junta Mayor a un total estado de indeficción».
En resumen, la jornada del 1 de mayo en Barquisimeto se presenta como una clara muestra de la determinación de los trabajadores larenses por alcanzar salarios justos y condiciones laborales dignas, insistiendo en que su lucha es pacífica y en beneficio de toda la sociedad venezolana.
