El papel del teatro siempre ha sido cuestionar, criticar o burlarse de la realidad que se vive; en drama o comedia, o las dos juntas. Y la obra Mientras te Olvido, del periodista Andrés Correa G, no escapa de eso. Las funciones son de jueves a domingos en el Centro Cultural BOD – Corp Banca, Caracas.
El montaje está protagonizada por Carmen Julia Álvarez, Alberto Alifa y Francis Romero, quienes le dan vida a Celia, al señor Montoya y a Ermenegilda, bajo la dirección del actor Marcos Moreno, y la producción del también actor Rolando Padilla.
La historia cuenta de una familia que lleva años tratando de adaptarse a su nueva realidad en otro país. Es una aproximación intimista y universal al exilio como experiencia humana, que no pretende ser un documento de análisis, ni juicio histórico a ningún país en particular. Pero al mismo tiempo es la historia de muchas naciones y personas.
Es una tragedia donde la profesora Celia, al regreso de su marido, tras una súbita partida, se encuentra con una satírica relación de su esposa con la empleada de medio tiempo.
Galardonada en NY
Es un relato lleno de diálogos fuertes, cortantes, directos y sin artificios. La obra fue galardonada en Nueva York en la edición 2009- 2010 de Nuestra Voces MetLife/ Repertorio Español, quizás el concurso más importante de dramaturgia sobre temática hispana en Estados Unidos, donde tres obras de Correa han sido finalistas.
Mientras te Olvido nació hace mucho tiempo, inspirada en ideas que estaban en el aire y en el mar, aparentemente sin conexión. También incluye varias tesis sobre el exilio de las que Correa fue jurado y/o tutor cuando trabajó como profesor de periodismo en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), escuela de la cual egresó Cum laude.
Desde que culminó la pieza recibió la aprobación de prestigiosas figuras del exilio antillano como: Don Armando Valladares, Delia Fiallo y Teresa Dovalpage, quienes además de sus credenciales profesionales y académicas, son protagonistas del destierro y expertos de las muchas maneras en que esta realidad puede asumirse, bien como una derrota, o un triunfo de la dignidad.
Correa destaca que el exilio tiene que ver con rechazo. “La patria es el gran hogar, y cuando ese hogar no tiene espacio y te patea, estamos hablando de una secuela mental inevitable”, expresó el autor.
Explicó que el exilado es un huérfano recogido en otra nación por caridad. “Pero al destierro lo precede algo más grave. Celia lo dice: ‘peor que salir al exilio es sentirse extranjero en la tierra que se supone es la tuya’. El señor Montoya opina lo contrario: ‘el exilio nunca es la solución; hay que quedarse a luchar, cueste lo que cueste; salir es morir”.
La cineasta venezolana Solveig Hoogesteijn expresó sobre la obra: “Me parece una de las obras más valientes que he visto en los últimos años, en cuanto a su contenido. Los personajes excelentes. La recomiendo a diestra y siniestra”.
