La celebración eucarística dio apertura a los actos solemnes de la Alcaldía de Iribarren en ocasión del 460º aniversario de la ciudad de Barquisimeto.
Desde el altar de la iglesia La Concepción, los presbíteros Juan Bautista Briceño, Oscar Freites, Daniel Guerra, Adolfo Rojas y monseñor Nelson Torrealba, presidieron la liturgia y dirigieron a las autoridades presentes mensajes de esperanza y motivación para su gestión.
La banda marcial Sargento Edecio Álvarez, estuvo a cargo de la música, bajo la dirección del director-presbítero Efraín Pastrán.
“Hemos dado gracia a nuestro Dios por la oportunidad que nos brinda de vivir en una ciudad como la nuestra. He pedido la bendición para nuestra ciudad, principalmente para nuestras niñas y niños”, fueron las primeras palabras de la máxima autoridad del municipio Iribarren.
Eran las 11:15 de la mañana, cuando el estruendo de los fuegos artificiales previó el inicio de la segunda actividad.
Así bien, al son de la Banda Municipal la alcaldesa Amalia Sáez, en compañía de autoridades municipales, avanzó hacia la plaza Bolívar para encabezar la entrega de ofrenda floral de parte de instituciones con presencia activa en la jurisdicción.
Sesión solemne
Más tarde, el presidente de Corpolara, Luis Reyes Reyes, fue el orador de orden de la sesión solemne de la Cámara Municipal.
El máximo líder del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en la región, se dirigió a personalidades y representantes de diferentes consejos comunales que se acercaron a las inmediaciones del Palacio Municipal, dando en primera instancia palabras de bienvenida.
En tanto, los 24 barquisimetanos seleccionados para recibir la orden Ciudad de Barquisimeto, en sus tres clases, esperaban subir al estrado.
La sociedad Anticancerosa del estado Lara, el equipo de Ciclismo Élite del municipio Iribarren y Destacamento Nº 44 de la Guardia Nacional, entre otros, recibieron de manos de la alcaldesa y César Gavidia, la condecoración.
Finalmente, la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, acudió a la sesión solemne para recibir una orden especial.
Al principio, aseguró a los medios de comunicación que al final de la jornada daría declaraciones, sin embargo, justo cuando el grupo musical Un Solo Pueblo terminó su intervención, se marchó sin pronunciar palabra.
Fotos: Simón Alberto Orellana
