Con las manos amarradas con una cuerda azul, los pies con tirro negro y varios impactos de balas, fue encontrado el cadáver de un joven de quien hasta ahora se desconoce la identificación. El hallazgo se realizó la mañana de este sábado en el sector Cocorotico de Los Naranjillos en el municipio Palavecino.
El cuerpo sin vida yacía en medio de un matorral a orillas de la carretera, a unos 400 metros de algunas viviendas. Estaba vestido con un short color naranja, zapatos deportivos negros con verde y una franelilla verde con la cual le taparon el rostro.
Un hombre presente en el lugar, comentó que como a las 10:00 de la noche del viernes había escuchado unos disparos, los cuales pudieron ser los que le propinaron al hoy occiso.
Al oeste otro homicidio
Iván José González Sisirucá, de 28 años, se resistió al robo de su automóvil y le propinaron dos disparos certeros que acabaron con su vida. El suceso se registró aproximadamente a las 6:00 de la mañana de este sábado en la bomba adjunta al restaurante El Pescaíto en la avenida Florencio Jiménez, kilómetro 12 en la vía a Quíbor, cuando dos sujetos lo interceptaron y bajaron de su vehículo, un modelo C-10, placas 457IAM, para posteriormente efectuarle los disparos.
La víctima fue llevada al ambulatorio del barrio El Bolívar, donde murió tras su ingreso.
Mientras que en extrañas circunstancias ultimaron a un comerciante dentro de su residencia en la urbanización El Recreo de Cabudare. El fallecido respondía en vida al nombre de Carlos José Arráez Sira, de 28 años, quien recibió una herida por arma blanca en el cuello que lo dejó sin signos vitales.
Por otra parte, en la avenida principal de Los Pocitos, liquidaron a Elvis José Figueredo, de 18 años, cerca de su residencia. El homicidio se cometió a las 10:10 de la noche del jueves, cuando le propinaron un tiro en el cráneo y otro en la región auricular izquierda con salida en la frente. Las autoridades manejan como móvil del hecho, el ajuste de cuentas.
