No fue fácil para las familias que ya recuperaron a sus seres queridos, haberlos vistos detenidos por sólo acudir a una protesta pacífica. No fue fácil llorar amargamente a escondidas para que los pequeños de la casa no notaran que algo malo pasaba, sin embargo, lo más importante finalmente ha ocurrido en las últimas horas: la liberación de estudiantes y otras personas que pasaron cerca de cuatro días sin libertad.
Ahora bien, otros tantos hogares siguen en la agonía de esperar justamente la libertad plena de sus seres queridos, los mismos que pedían el reconteo de votos al Consejo Nacional Electoral sin hacer uso de la violencia. Sólo en Barquisimeto, cerca de 80 ciudadanos fueron apresados por militares que después los trasladaron hasta la sede del Destacamento 47 de la Guardia Nacional, en la avenida Morán.
EL IMPULSO continúa acercándose a los familiares y amigos que denuncian abusos por parte de las autoridades que mantienen aprehendidos a jóvenes y adultos a causa de las protestas suscitadas el lunes y martes en los alrededores de la oficina regional del CNE. Testimonios desconsoladores que dan lecciones de vida a quienes sufren en carne propia la detención de un hijo, esposo, amigo.
“Ya no creo en la justicia de mi país. Me alejan de lo más valioso que tengo: mi único hijo”, expresó una de las madres que no quiso identificarse ni ser fotografiada por temor a recibir represalias. Su vivencia es igual de dolorosa para el resto de la parentela que aguarda en las inmediaciones del Círculo Militar.
“Momentos de desesperación”
El abogado José Gregorio Zaá, representante jurídico de la Mesa de la Unidad Democrática, declaró que ha vivido de cerca los sinsabores de los familiares de los detenidos. No obstante, no dudó en que las próximas horas continúen otorgando la libertad a las personas que fueron detenidas en las manifestaciones en reclamo al CNE.
Este lunes fueron presentados en el Tribunal de Control número nueve, 17 personas que habían sido detenidas el lunes en horas de la tarde. Explicó que aunque el Ministerio Público no ha calificado los delitos aún, pudieran estar frente acusaciones de alteración al orden público, resistencia a la autoridad, obstrucción de la vía pública. ““Lamentamos, sin duda alguna, las conductas arbitrarias de la Guardia Nacional y otros organismos del Estado que se han ensañado contra estas personas a pesar de que la Constitución venezolana establece el derecho a la protesta”, sostuvo.
“Los ciudadanos y ciudadanas tienen derecho a manifestar, pacíficamente y sin armas”, expresa claramente la Carta Magna a propósito del alegato tanto de detenidos, familiares como abogados defensores.
Mientras estuvieron en el Edificio Nacional, los familiares lamentaron la excesiva seguridad en los pasillos del piso seis, impidiéndoles ver a los imputados aunque fuera de lejos. Ni siquiera las personas que acudían por otras causas tenían la posibilidad de acceder al ala izquierda de ese piso.
Entre los representantes políticos, estuvieron las diputadas del parlamente regional por la oposición Sagrario Pérez y Grace Lucena. Además otros representantes de partidos que igualmente expresaron solidaridad con los detenidos y sus familiares.
Lorenzo Monasterios, ex diputado del Consejo Legislativo del estado Lara y dirigente de Un Nuevo Tiempo, manifestó su descontento con la aprehensión de los jóvenes y solicitó respeto por sus derechos humanos.
Examir Andara, representante de la Causa R, estuvo en las primeras horas del día a las afueras del Destacamento de Seguridad Urbana (DSUR) y manifestó su rechazo rotundo a “las violaciones y atropellos cometidos en contra de nuestros jóvenes.
Son universitarios con un espíritu de democracia, venezolanos como todos los demás, pero vulnerados en sus derechos”, expuso.
En las próximas horas se espera la libertad del resto de personas que fueron detenidas por militares en los límites del CNE, al este de Barquisimeto.
